Sinopsis: En una elegante calle londinense se perpetra un horrendo crimen: Fanny, una joven de diecisiete años es violada y asesinada brutalmente.
El caso se asigna al Inspector Pitt, quien como en otras ocasiones, se sirve de su perspicaz y aristocrática esposa Charlotte para penetrar en el hermético mundo de la alta sociedad, donde, tras la fachada de respetabilidad, encontrarán un enrarecido ambiente: supersticiones, vampiresas insaciables, alcohólicos, presuntos suicidios... y hasta ritos satánicos.
Un excelente caldo de cultivo para los perversos planes de un sanguinario asesino.
El caso se asigna al Inspector Pitt, quien como en otras ocasiones, se sirve de su perspicaz y aristocrática esposa Charlotte para penetrar en el hermético mundo de la alta sociedad, donde, tras la fachada de respetabilidad, encontrarán un enrarecido ambiente: supersticiones, vampiresas insaciables, alcohólicos, presuntos suicidios... y hasta ritos satánicos.
Un excelente caldo de cultivo para los perversos planes de un sanguinario asesino.
Opinión: A mí me suele gustar Anne Perry como escritora, pero esta vez me ha desilusionado mucho.
La novela es lenta, muy, muy lenta y el desenlace es muy forzado y parece que se descubre por casualidad.
El verdadero policía no llega a conclusiones y es su mujer la que descubre el asunto. No es la mejor, desde luego.
No se la recomiendo a nadie.
La novela es lenta, muy, muy lenta y el desenlace es muy forzado y parece que se descubre por casualidad.
El verdadero policía no llega a conclusiones y es su mujer la que descubre el asunto. No es la mejor, desde luego.
No se la recomiendo a nadie.
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