Mi abuela te dirá que el Homo antecesor era todo un partidazo, que Cleopatra utilizó técnicas de marketing para mantenerse en el trono, que la reina Juana I de Castilla ¿se hacía la loca? y que las flores, sobre todo las portuguesas, tienen más potencia que las balas.
«Con unas viñetas y una copita de anís, yo te lo cuento todo en un pispás», sostiene mi abuela. Y mientras tanto, como quien no quiere la cosa, te hace unas croquetas de picadillo o teje un jersey de perlé para el caniche de su vecina.
Con las breves historias de este libro descubrirás por fin que la historia, la española y la universal, la antigua y la contemporánea, es algo fascinante.
Un único consejo: no le nombres a Fernando VII. Mi abuela no lo traga. En esos casos se ofusca y es capaz de freír croquetas de perlé y hacer picadillo con el caniche de su vecina.
Opinión: Este libro gráfico promete más de lo que da.
Ya sé que toda la Historia no se puede leer en un boleo, pero ir de la Ceca a la Meca es un poco desconcertante.
Los dibujos son simpáticos, y algunas expresiones, también, pero no da lo prometido y mucho menos se puede decir que sea un libro de entretenimiento o consulta.
Si realmente, que no lo creo, es su abuela la relatora, más o menos, de estas historias, enhorabuena, tiene una abuela más que instruida.
Lo mejor de todo es que sus beneficios son para una obra benéfica.
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