Sinopsis: Año 1888. Tras la muerte de su madre, el joven Sabino Arana, quien pocos años después fundara el Partido Nacionalista Vasco, decide dejar los estudios que estaba cursando en la Universidad de Barcelona y regresar a Bilbao. Un tanto confuso y desorientado, sin saber qué hacer con su vida, su hermano mayor le propone ir a Londres para que, bajo la tutela de un viejo socio y amigo de su padre, fallecido pocos años antes, aprenda el idioma y se sumerja en el mundo de los negocios. Pero, sobre todo, para que se recupere anímicamente.
Pese a sus protestas iniciales, accede finalmente a los deseos de su hermano y partirá hacia la capital británica. Pero sus intenciones de tomarse su nueva vida con calma se verán truncadas, pues la fecha de su llegada a la capital británica será también la elegida por el hombre que posteriormente será conocido como Jack el Destripador para cometer el primero de sus asesinatos.
Sabino, nada más desembarcar, se verá arrastrado, a instancias del hijo de su tutor, extrañamente interesado en el caso, a una sorprendente investigación para desvelar quién está detrás de esos horribles y macabros asesinatos y qué pretende con ellos.
Opinión: Lento, tedioso, con infinidad de repeticiones innecesarias y circunloquios.
No digo que esté mal escrito, pero para no pasar nada y tener un final fantástico es un libro tan lento que lo he tenido que leer a trozos.
No dejo un libro por leer, nunca desespero y pienso que el autor-a puede dar un giro a la trama o al estilo que me lo haga más atractivo, pero en este caso... no.
En un principio me interesó porque Sabino Arana era para mí un gran desconocido, pero después de esto... creo que lo va a seguir siendo por mucho tiempo.
Lo he llevado arrastrando desde el año pasado, era un martirio intentar sacar posibilidades, acciones, dobles sentidos, todo imposible.
No he conocido una forma más irritante de contar e investigar los crímenes de Jack el Destripador. Ya sé que es una novela, por lo tanto, llena de fantasía, pero esto me supera. Es tan poco ágil como un galgo con las piernas escayoladas.
No sé si atreverme a intentar otro libro de este autor y darle otra oportunidad. Ya veremos.
