Sinopsis: Un crimen terrible sacude la apacible comarca de la Terra Alta: los propietarios de su mayor empresa, Gráficas Adell, aparecen asesinados tras haber sido sometidos a atroces torturas. Se encarga del caso Melchor Marín, un joven policía y lector voraz llegado desde Barcelona cuatro años atrás, con un oscuro pasado a cuestas que le ha convertido en una leyenda del cuerpo y que cree haber enterrado bajo su vida feliz como marido de la bibliotecaria del pueblo y padre de una niña llamada Cosette, igual que la hija de Jean Valjean, el protagonista de su novela favorita: Los miserables.
Partiendo de ese suceso, y a través de una narración trepidante y repleta de personajes memorables, esta novela se convierte en una lúcida reflexión sobre el valor de la ley, la posibilidad de la justicia y la legitimidad de la venganza, pero sobre todo en la epopeya de un hombre en busca de su lugar en el mundo.
Opinión: Creo que este Premio Planeta está muy bien dado.
No suelo coincidir con el jurado, la mayoría de ellos no me gustan demasiado y eso que todos los años me los regalan, pero...
La verdad es que me ha gustado la forma de "no hablar" del protagonista, su forma de pensar y su forma de enfrentar las cosas. Es muy diferente a los polis-estrella, esos que resuelven todo a la primera, a los que estamos acostumbrados en la novela inglesa o nórdica o en las películas o series americanas.
Sin ser lacrimógena, comprendes la dura infancia que ha tenido y por la que no siente demasiado resquemor, aunque le ha marcado de por vida.
Me ha gustado mucho y la recomiendo sin tapujos.
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